Las autoridades señalaron al Ejercito de Liberacion Nacional - ELN, como el grupo terrorista responsable de la colocación de minas antipersonales o "quiebrapatas" en esta zona de Colombia.

Según el Ejército, en los ultimos 9 años han muerto 200 personas y alrededor de 800 han resultado heridas por causa de las minas antipersonales.

Así mismo, en El Carmen, fueron emboscados 9 carros de la policía que se desplazaban para dar apoyo a los policías de la población de Zambrano, siendo asesinados el capitán Hector Vargas Suarez 33 años, el sargento segundo Javier Calvo Rocha, 36 años, el subintendente Fabio Salcedo Arrieta, 27 años; y los patrulleros Duilmar Perez Solano y Carlos Mazo Sanchez.

Según el Ejército, al percatarse de la presencia de los soldados, el cabecilla de la cuadrilla, alias 'Rolando', asesinó con disparos en el corazón al agente John Jairo Posse Samudio y al patrullero Alexis Enrique Vera Fajardo.

El agente Víctor Julio Sierra Gélvez, en la confusión de los primeros momentos escapó de la vigilancia de los subversivos y se internó en la selvática zona.

Los militares encontraron, en una destartalada casa que les sirvió de refugio durante los últimos 60 días, al sargento segundo Jesús Gregorio Cáceres, secuestrado en San Andrés (Santander), al Subintendente Rafael Fernando Guerrero y a los agentes Víctor Julio Botello Páez, Armando Buendía Carrillo y José Isaac Tarazona Guerrero

Asesinados:
Agente JOHN JAIRO POSSE SAMUDIO
Patrullero ALEXIS ENRIQUE VERA FAJARDO

Carlos Noratto Guerra fue secuestrado el 10 de agosto de 1998, cuando soldados del Batallón de Contraguerrilla Coyará, adscrito a la Brigada XI, penetraron a la selvática región de Tamborales, corregimiento de Pavarandó, municipio de Mutatá, en Antioquia para combatir al bloque noroccidental de las Farc, culminando cuatro días después de cruentos combates, donde murieron 45 soldados y hubo varios desaparecidos, entre ellos Carlos Noratto.

Según las versiones que manejan las autoridades militares, el soldado Noratto murió al parecer debido a las complicaciones de una herida de bala que había recibido al intentar escapar por segunda ocasión, y su nombre aparecía en la lista de soldados y policías que supuestamente iban a ser liberados hace dos semanas por motivos de salud, de acuerdo con la información que el 15 de diciembre pasado había suministrado la Brigada.

Asesinado:
Soldado CARLOS NORATTO GUERRA

Horas despues fue encontrado el cadaver del joven soldado adscrito a la Brigada IV del Ejército, con quemaduras de ácido en su mano derecha, y con impactos en su cabeza y en diferentes partes del cuerpo.

Un rápido operativo de la policía, permitió la captura de los asesinos, quienes fueron identificados como guerrilleros de las comunistas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia - FARC.

En esta acción resultaron muertos los soldados Jairo Misat Camargo, Jorge Alberto Quintero Picón, Darío Peñaranda Bohorques, José Pérez Navarro, Dagoberto Ayala, Eduardo Enrique Rodriguez, Luis Poello Zambrano y Omar Carreño Botello, y resultaron heridos Angel Ternera Acuña, dos soldados más sin identificar y el civil Rafael Soto de 78 años.

En el sitio de la emboscada se presentó una gran resistencia por parte de los soldados ante la embestida de mas de 400 guerrilleros comunistas de las FARC, apoyados por guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional - ELN.

En el ataque que se inició a las 4:30 de la mañana fueron asesinados el capitán Juan Carlos Saavedra, el teniente Victor Bombiela Ortiz, el sargento Robinson Jinete Blanco, el cabo primero Alvaro Muñoz Castro, y los infantes de marina Francisco Burbano Chaverra, Esteven Estupiñan Muñoz, Christian Garcia Castillo, Reinaldo Grande Giraldo, Jofreivan Granja Martinez, Rafael Herrera Marulanda, Sandro Jaramillo Marin, Maximiliano Martinez Ramirez, Urbano Martinez Riascos, Jorge Albeiro Atapuma Oviedo, Oneider Zapata y Luis Fernando Orozco Vargas.

Los terroristas destruyeron con explosivos las antenas de Telecom, Comcel y Tele Buenaventura dejando incomunicado un gran sector de la costa pacifica del departamento del Valle del Cauca.

En la emboscada fueron asesinados el capitán Edier Otálvaro Pulgarín, 36 años, padre de tres niños y comandante del Quinto Distrito de Policía en Nariño, el sargento segundo Rubio Arcesio Ordoñez Bolaños y el agente Arturo Moncayo Riascos, 36 años.

Los bandoleros, pertenecientes al frente Comuneros del Sur del ELN, también secuestraron a los agentes Jairo Solarte Martínez, 30 años, y Carlos Alberto Benavidez Portillo, 28 años, y dejaron herido al patrullero Jesús Gallego Molina, 20 años.

Herido:
Patrullero JESUS GALLEGO MOLINA, 20 años

Secuestrados:
Agente JAIRO SOLARTE MARTINEZ, 30 años
Agente CARLOS ALBERTO BENAVIDEZ PORTILLO, 28 años

Según informaciones de inteligencia militar el ataque fue planeado desde la zona de distensión y desde allí salieron bandoleros pertenecientes a los frentes 2, 32, 48, y 49, todos al mando de 'Fabián Ramírez', con el propósito de tomarse a sangre y fuego la base militar.

En el ataque murieron 30 uniformados, dos oficiales, un suboficial y 27 soldados. Durante dos horas aproximadamente, 60 militares más estuvieron desaparecidos, pero luego fueron ubicados en medio de la selva por los aviones 'Fantasma' y los helicópteros 'Arpias'.

El informe oficial da cuenta que las Farc realizaron dos ataques más a la base militar después del hecho en la madrugada. Un segundo intento por tomarse la base se hizo sobre las doce del medio día, pero también los militares repelieron el ataque. El otro intento se llevó a cabo al finalizar la tarde .

La arremetida de los terroristas comunistas tenía como objetivo, de acuerdo con la versión del comando del Ejército, tomarse la base y destruirla para obligar a las tropas a abandonar ese sector del Putumayo.

Según cifras de la Fuerza de Tarea Conjunta del Sur, esta zona tiene más de 50 mil hectáreas de coca sembrada (la mitad de la que hay en Colombia), que producen 250 mil kilos de droga al año.

Igualmente un indígena de nombre Apolinar Dizu, del cabildo de Canoas, Cauca, resultó asesinado en la cruenta emboscada al pasar casualmente por el lugar de los acontecimientos.

Los cuerpos del Suboficial y los tres soldados profesionales presentaban señales evidentes de tortura, manos amarradas y cortadas a lo largo del pecho y abdomen, y de sus cuerpos habían sido extraídas las vísceras, según se pudo constatar durante la diligencia de levantamiento de cadáveres practicada por funcionarios de la Fiscalía.

El suboficial y los soldados profesionales se movilizaban vestidos de civil y completamente desarmados, a bordo de un camión particular, llevando las provisiones al personal militar que permanece en esa región, cuando fueron interceptados, torturados y asesinados posteriormente por los terroristas de las FARC en una clara violación del Derecho Internacional Humanitario.

El cuerpo del militar de 19 años de edad, secuestrado por los narco-guerrilleros el pasado 28 de junio en cercanías de la base militar de El Dorado en el departamento del Meta, estaba en avanzado estado de descomposición y presentaba signos de tortura.

No sería la primera vez, que en una violacion más del DIH, los narcoterroristas de las FARC utilizan armas químicas en un ataque, y será el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Colombia que confirmará este hecho, despues de realizar las investigaciones necesarias.

Asesinados:
ABELARDO FRANCO ARANDA
EDGAR OSORIO ALDANA
JAIRO MORALES BERNAL
PABLO ROLOHG ESCOBAR

En la la emboscada, registrada a las 10:00 a.m. sobre la carretera que de Tuluá conduce a La Marina murieron el intendente Pedro Salazar Urrea, de 35 años; el subintendente Ricardo Salazar Puente, de 30; el patrullero Nelson Rodríguez Reyes, de 28; y el agente Tulio Harold Marmolejo Rodríguez, de 31 años.

Heridos resultaron el subteniente Santiago Garavito Aranzazu y los agentes Héctor Fabio Bravo Ramos, de 29 años; Néstor Mendoza Zambrano, y Cipriano Delgadillo Correa, de 29 años.

Los agentes del grupo de Contraguerrilla de la Policía, que se desplazaban en siete vehículos fueron recibidos con ráfagas de fusil por los terroristas, que estaban escondidos en dos casas desocupadas a los lados de la vía, lo mismo que una ambulancia que llegó para rescatar a los heridos y que fue impactada con 14 proyectiles de fusil, resultando ilesos el conductor y una enfermera.

Los cuerpos del Intendente Heriberto Cordero Guerrero, del Subintendente Fabián Alexander Torralba Vásquez y del patrullero José Gregorio García Sanguino, fueron hallados sin vida en jurisdicción del corregimiento de Palomino, Riberas del Río San Salvador, y presentaban impactos de arma de fuego y señales de torturas. El vehículo Toyota Hilux en que se transportaban fue encontrado totalmente incinerado en una trocha del corregimiento "Los Cocos", estribaciones de la Sierra Nevada de Santa Marta.

Una serie de actos de barbarie contra miembros de la Fuerza Pública, por parte de las FARC en zonas aledañas al municipio de Barbacoas, Nariño, denunció el Ejército Nacional, cuando los soldados Tito López Moreno y José Antonio Montealegre, fueron secuestrados por los guerrilleros para ser luego asesinados.

El soldado José Antonio Montealegre fue amarrado de pies y manos a un árbol, y al soldado Tito López Moreno, le desfiguraron el rostro con ácido.

El Ejército denunció también que los terroristas de las FARC utilizaron a los civiles como escudos humanos durante los retenes que realizaron en el municipio de Barbacoas, violando las mínimas normas del Derecho Internacional Humanitario.

Los soldados John Clemente Castillo y Segundo Augusto Valverde Arroyo, adscritos a un batallón acantonado en Orito, departamento de Putumayo, que disfrutaban de una licencia y se movilizaban en un bus hacia el puerto de Tumaco, se encontraron con un retén que los bandoleros tenían montado a escasos 3 kilómetros del municipio de Ricaurte, fueron obligados a bajarse del vehículo y de inmediato acribillados por los terroristas.

El oficial, quien iba fuera de servicio y de civil, fue plagiado por narcoterroristas del Ejército de Liberación Nacional - ELN, el pasado 17 de diciembre a las 5 de la tarde en el sitio Molino Viejo, en la carretera que lleva al municipio de Cisneros, quienes lo fusilaron en una clara violación del Derecho Internacional Humanitario, y a pesar de haberse acogido una vez más al proceso de paz que el gobierno de Colombia lleva a cabo desde hace varios años.

Capitán LUIS FERNANDO VÉLEZ SAAVEDRA