Guerrilla del ELN, acorralados
Fuerte cerco Militar versus debilidad del Gobierno
Cali, Noviembre 6 del 2000
Una vez el Gobierno decide negociar la liberación de los plagiados del kilómetro 18, la primera condición que impusieron los voceros de la guerrilla fue cambiar de sitio de llegada de los liberados.
En efecto, apenas la Comisión Humanitaria Internacional recibe a los plagiados, estos son trasladados a la base aérea Marco Fidel Suárez y no a la sede de la III Brigada donde el general Canal había permitido el ingreso de la prensa y los familiares de los plagiados, cosa que no quería el Gobierno.
Con la decisión, la guerrilla pretendía mostrar que la liberación no era producto de un éxito militar lo que en efecto ocurrió por el cerco a que fueron sometidos los alzados en armas durante 46 díassino a un gesto humanitario del Eln que busca, al igual que las Farc, una salida negociada al conflicto armado.
El cerco militar dijo una fuente castrense iba dirigido a que la guerrilla tuviera que entregarse o esperar un momento oportuno que garantizara a las fuerzas del orden un 99 por ciento de seguridad de que, en un operativo militar de rescate, la vida de los secuestrados no corría peligro alguno.
Con la inmovilización del 50 por ciento del grupo guerrillero 18 muertos y 26 capturados el Ejército veía que la operación estaba dando resultado. La decisión del Gobierno, pues, de replegar la tropa para buscar un acuerdo humanitario que permitiera la liberación sacó de casillas al general Canal.
El miércoles en la noche en su alocución televisada al país, el presidente Pastrana no mencionó por ningún lado al general Canal, el hombre bajo cuyo mando estuvieron los operativos. ¿Por qué?
La fuente de Palacio dijo que el Presidente estaba muy molesto por la forma como Canal pretendía recibir a los secuestrados: con familiares y periodistas. Eso lo mortificó mucho. Por eso, quien apareció en su discurso fue el general Carlos Alberto Fracica, comandante de la Fuerza de Despliegue Rápido (Fudra).
El viernes, 48 horas después de la intervención presidencial, Canal renunció. En un lacónico comunicado dirigido al ministro de Defensa y a los comandantes del Ejército y de las Fuerzas Militares expresó su interés irrevocable de abandonar la vida militar. Así terminaban 35 años al servicio de las armas de uno de los generales más preparados y respetados del país.
En la carta de ayer, el Ministro de Defensa reconoce la trayectoria de Canal pero aclara respecto del reparo que este hizo por el repliegue de tropas ordenado por el Gobierno: "Esta no fue una decisión improvisada; fue ampliamente debatida y hoy más que nunca estoy convencido que se tomó la decisión correcta. No porque fuéramos blandos con los guerrilleros, sino porque primó en la decisión la vida de los secuestrados".
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